¿Son buenas para la salud las palomitas de maíz?
Somos muchas las personas que consumimos palomitas, ya sea cuando vamos al
cine, viendo una película en casa, etc. solemos comer estos deliciosos copos de
maíz. Pero, ¿qué hay en tus palomitas? En este artículo descubriremos el lado
oscuro de las palomitas de maíz de microondas.
El maíz, en su estado orgánico, es un grano con un alto contenido de fibra
y una buena fuente de ácido fólico, vitamina C y niacina (vitamina B3). Y las
palomitas recién hechas a base de granos de maíz orgánicos han sido muy
populares durante muchas generaciones como una deliciosa y natural merienda
saludable. Sin embargo, la versión para microondas comercial es
fundamentalmente diferente, ni natural ni saludable, ya que viene con un cóctel
de toxinas implicadas en varios problemas de salud, incluyendo la enfermedad de
Alzheimer, la enfermedad pulmonar respiratoria y la enfermedad renal crónica
por nombrar algunos.
La comodidad, la facilidad de preparación y el aroma embriagador son tres
razones para hacer palomitas de microondas, pero aquí hay tres grandes razones
por las que no debe hacerlas:
El saborizante de mantequilla es malo para la salud
El saborizante de mantequilla que se emplea en las palomitas de microondas
puede causar enfermedades. El diacetilo es un producto químico utilizado en las
palomitas de maíz para microondas que da al producto su sabor y aroma. Un
estudio publicado el 1 de agosto de 2012 en la revista ACS de Investigación
Química en Toxicología indica que el diacetilo aumentó el nivel de las
proteínas beta-amiloides en el cerebro. Este agrupamiento es un indicador de la
enfermedad de Alzheimer. El diacetilo también daña las células nerviosas. Este
estudio advirtió de la toxicidad neurológica grave en los casos de
sobreexposición a este producto químico. Incluso los productos que pretenden
evitar diacetilo utilizan aromas de mantequilla artificial similares que por
desgracia son otras formas de diacetilo.
Qué hay en tus palomitas de maíz
El revestimiento antiadherente de las bolsas es un tóxico para el hígado y
el sistema inmunológico.
El ácido perfluorooctanoico es una sustancia química sintética aplicada al
revestimiento de bolsas de palomitas de microondas. Su aplicación impide la
interacción con líquidos o grasas, creando la superficie antiadherente en el
revestimiento de las bolsas. Es cancerígeno y tóxico para los animales y los
seres humanos y permanece en el medio ambiente de forma indefinida. El
colesterol elevado, problemas renales crónicos y problemas respiratorios como
el asma y la enfermedad pulmonar son algunos de los problemas de salud
asociados con el ácido perfluorooctanoico.
Para los usuarios de palomitas de maíz de microondas, los estudios indican
que el 20 por ciento del ácido perfluorooctanoico en la sangre proviene de las
palomitas de maíz que se consumen. El 80 por ciento de estos gases tóxicos se
emiten al momento de la apertura de la bolsa, a partir de la cual los niveles
comienzan a disminuir, aunque siempre está presente después de la apertura.
Los aceites hidrogenados
La mayoría de las palomitas de maíz de microondas se hacen con alguna forma
de aceite alterado, típicamente aceite de coco o aceite de soja convertidos en
grasas trans que obstruyen las arterias que causan las enfermedades del corazón
y la inflamación en el cuerpo. Normas de etiquetado de la FDA permiten que los
fabricantes redondeen a cero cualquier valor de grasa trans que se encuentra
debajo de 0,5 g
por porción del envase, de forma que incluso puede claramente decir “sin grasas
trans” cuando todavía puede tener un máximo de la mitad de un gramo por
porción.
¿Cuál es la alternativa?
La alternativa natural a las palomitas de maíz para microondas, por
supuesto, son las palomitas de maíz hechas en casa, que son sorprendentemente
fáciles de preparar sin los peligros de su contraparte empaquetado y con todos
los beneficios del maíz.
La receta es la siguiente:
Calienta dos cucharadas de aceite o mantequilla en una olla grande a fuego
medio.
Añade 1/2 taza de granos de maíz orgánico.
Mezcla todo en el aceite y tapa.
El maíz comenzará a estallar en menos de un minuto. Una vez que el sonido
de estallido se detiene, ya está hecho.
Espolvorea con sal marina y/o cualquier otro saborizante natural.
“Gracia y Paz”
Carlos Martínez
M_La Buena Salud
al alcance de todos
Fuente: Mejor
con Salud
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